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El Trasvase Tajo-Segura , infraestructura de vida y sostenibilidad para el Levante

Los cultivos de regadío no son una moda en el Levante. La tradición del regadío en esta tierra es milenaria por su clima favorable y la calidad de sus tierras. Tradición, que con el paso del tiempo ha evolucionado en una modernización y una tecnificación del campo con una clara vocación productora y exportadora. Sin embargo este auge se ve afectado por la escasez de agua en el Levante. El Trasvase Tajo-Segura viene a solventar esta dificultad, un problema de largo recorrido que ha generado conflictos, en más de una ocasión, injustificados.

La desaparición del Trasvase Tajo-Segura supondría un auténtico desastre para el Levante español, y en consecuencia, también para España al repercutir directamente en dos de los sectores fundamentales para la riqueza del territorio, como lo son el turismo y la agricultura de regadío, causando pérdidas económicas incalculables y miles de puestos de trabajo.

El agua que llega del Trasvase ha supuesto la evolución del agricultor tradicional al empresario agrícola, del campesino al ingeniero agrónomo y de la tradición a la gestión tecnificada de las explotaciones agrícolas, referente mundial en la eficiencia del agua. Por esta razón los habitantes de este territorio no pueden permitirse renunciar a la disposición del agua del Trasvase.

A lo largo de la historia, muchas han sido las personalidades que han defendido a los pueblos que saben compartir el agua. Nelson Mandela, político y activista en contra del apartheid, ha alabado y defendido durante toda su trayectoria la fraternidad entre los territorios que comparten recursos hídricos, tema que le afectó de cerca con motivo de un polémico trasvase desde un río de Lesoto hacia Johannesburgo, en Sudáfrica.

El poeta oriolano Miguel Hernández también fue un defensor del Trasvase, y hacía guiños a este movimiento en sus obras poniendo en bocas de sus personajes frases como ésta: “Donde no haya río, habrá canales de agua y granito que están pidiendo en un grito el Tajo y el Ebro ya”. Los amantes de la tierra y de las personas que la habitan siempre han apostado por la solidaridad entre los pueblos y territorios, y más cuando hablamos del agua que nos da la vida. Demostremos que es posible, ¡todos con el Trasvase!

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